Biografia

Alfonso Ignacio Martín Lopez-Yebra

Madrid 1954, pasa los catorce primeros años de su vida en Sidi-Ifni, pequeña ciudad al sur de Marruecos y su juventud entre Las Palmas de Gran Canaria y la antigua Villa Cisneros, actual Dakjla, en la costa Occidental del Sahara.Con 22 años se traslada a Madrid para cumplir el servicio militar obligatorio.Nunca tuvo una vocación determinada, salvo la de soñar, por eso deambula unos años por la universidad devanándose entre unos estudios y otros, se decanta por los ordenadores y termina, programador y analista de sistemas informáticos, comenzando a trabajar para la empresa privada. A partir de 1984 va descubriendo poco a poco lo que iba a dar un sentido a su vida, el Arte, más en concreto, la pintura. Su interés se acrecienta y compagina su trabajo con una formación técnica propia, basada en los libros de D.José M.ª Parramón Vilasaló. En 1992 realiza su primera exposición individual en la ya desaparecida Galería Manuel Macias de Madrid y desde entonces muestra sus obras en diferentes Centros Culturales públicos y privados, Ayuntamientos, Galerías, Salas de Arte Polivalentes etc.

Fronteras

Primera frontera: De niño, cuando la inocencia era la constante, encaramado en la balaustrada, sobre aquel acantilado de tierra roja a veinte pasos de mi casa, entretenía mi tiempo en ver volar a las gaviotas, no a las gaviotas sedentarias de una parcela admisible, sino las gaviotas de alas sin músculo, aquellas que perseveraban en el aire, inmóviles, maestras del arte de la vela y la supervivencia.

Segunda frontera: Equilibrista a lomos del vértigo, trasteando unas escalinatas metafísicas, llegaba a la playa, cuya orilla no perdonaba el descuido. Entretenía mi tiempo contemplando la mar, mercurea, incontestable emperadora del planeta; Siete olas crecientes, longitudinales de espuma, acústicas cuando rompen en la arena; El océano de todas las horas de mi infancia, aquel océano terrible o manso, según los días vinieran.

Tercera frontera: Como artista, como pintor, no tengo ninguna filosofía, lo que me atrae es experimentar, expresarme libremente en la frontera de lo real, de la fantasía, de la incertidumbre. Nunca sueño cuando duermo; Mis sueños vienen cuando estoy despierto y sueño el mundo dentro de otros sueños e imagino el mundo dentro de otros mundos. Creo que el artista fundamentalmente, debe hacer soñar. Los objetos físicos, realidades y percepciones coexisten con objetos no físicos en un mismo espacio-tiempo; Busco las imágenes internas, fantásticas y misteriosas que van más allá de las certezas a las que estamos acostumbrados.